La tripulación bastante descortés para el servicio.. La comida debe mejorar un montón mucha harina mucho sandwich, la comodidad del avión es cada vez peor y los baños sucios siempre.
Mala experiencia, vuelo atrasado, en embarque nos tuvieron 30 minutos en el bus y luego otros 15 minutos en el bus al lado del avión,
Me gustó la puntualidad. También que, aunque el avión era pequeño y el equipaje de mano no cabía en las sombrereras, Te lo recogían y entregaban en la puerta. No me gustó que tuviéramos que usar el bus.
Excelente atención, tuve una duda y me la aclararon, muy amables, no molestaron si me vieron dormir
La experiencia de la tarjeta de embarque en Buenos Aires un desastre hay q hacer todo en mostrador cuando uno ya lo tiene en el celular. En vez de simplificar complican. El servicio de comidas mucho q desear la cena pésima, breakfast no hubo, desayuno malisimo un mini bocadillo asqueroso (literal).
En general toda la tripulación bien ,salvo un joven que parecía tener prisa por despachar ya casi en la última fase de repartir merienda ,pero los demás geniales
El abordaje fue aceptable, el servicio a bordo fue malo, nos dieron la comida, y repartieron café a todos menos a los últimos, no terminaron de servir desde la fila 45 ABC en adelante, después paso lo mismo con el refrigerio. El año pasado iberia fue mejor.
Nos perdieron las valijas, así que no puedo calificar bien la experiencia . Mí señora estuvo 2 días sin ropa para cambiarse y debió salir a comprar. No es la primera vez que nos pasa con Iberia.
La tripulación española ni siquiera saluda ni responde el saludo en la subida de el avión El vuelo estuvo restrasado A Las personas que teníamos conexiones no nos asesoraban ni ayudaban en nada , solo ponían atención a los españoles
Solo viajaba con un Carrión y me dijeron que tenía que bajarlo porque ni tenía espacio lo que me produjo varios inconvenientes pues tuve 5 horas en el aeropuerto de espera para transbordo y no puede coger ni una píldora pues estaba en el Carrión